Los orígenes de la tecnología de los fulminantes son objeto de grandes debates, pues son muchas las personas a las que se les ha atribuido su invención durante la primera mitad del siglo XIX.
Las pistolas con esta tecnología empezaron a ser usadas en gran escala durante la Guerra Civil estadounidense. Luego, las propias empresas que producían las armas reales empezaron a fabricar versiones de juguete de las mismas. Inicialmente, eran hechas con hierro fundido, pero después de la Segunda Guerra Mundial se empezó a utilizar una aleación hecha a base de zinc para su elaboración y, más recientemente, una de plástico. Dichas pistolas utilizaban unos casquillos de 1,2 a 1,4 milímetros de diámetro rellenos de pólvora, que eran percutidos en el tambor del artefacto para simular la explosión de un arma convencional.
Las pistolas de juguete de fulminantes se hicieron muy populares gracias a la aparición del cine, dado que muchas de ellas fueron endosadas con el nombre de héroes de la pantalla grande como el Llanero Solitario. Por más de un siglo estos juguetes han alimentado las fantasías y los juegos de generaciones de niños en todo el mundo y Colombia no fue la excepción: muchos de nosotros crecimos con pistolas de fulminantes o con muñecos que los usaban (entre los cuales sobresale una versión de He-Man dotada con esta tecnología). Es por eso que el paquete aquí publicado les traerá recuerdos a muchos.
Las pistolas con esta tecnología empezaron a ser usadas en gran escala durante la Guerra Civil estadounidense. Luego, las propias empresas que producían las armas reales empezaron a fabricar versiones de juguete de las mismas. Inicialmente, eran hechas con hierro fundido, pero después de la Segunda Guerra Mundial se empezó a utilizar una aleación hecha a base de zinc para su elaboración y, más recientemente, una de plástico. Dichas pistolas utilizaban unos casquillos de 1,2 a 1,4 milímetros de diámetro rellenos de pólvora, que eran percutidos en el tambor del artefacto para simular la explosión de un arma convencional.
Las pistolas de juguete de fulminantes se hicieron muy populares gracias a la aparición del cine, dado que muchas de ellas fueron endosadas con el nombre de héroes de la pantalla grande como el Llanero Solitario. Por más de un siglo estos juguetes han alimentado las fantasías y los juegos de generaciones de niños en todo el mundo y Colombia no fue la excepción: muchos de nosotros crecimos con pistolas de fulminantes o con muñecos que los usaban (entre los cuales sobresale una versión de He-Man dotada con esta tecnología). Es por eso que el paquete aquí publicado les traerá recuerdos a muchos.
